viernes, 20 de mayo de 2011

....mientras nos rabia el alma de dolor....

No tener palabras para explicar como te sientes, escalofríos al mirar a derecha e izquierda de la acera, llenarse los ojos de lagrimas al cruzar palabras con los vecinos, sentir un vacío enorme...ver como toda tu vida se descascara sabiendo que vas a tardar demasiado tiempo en encontrar los pedazos perdidos.
Cuando una vida es tocada por la desgracia tiene únicamente dos opciones, acabar hundiéndose o intentar sonreír mientras duele el alma; cierto es que hay distintos grados de desgracia, dentro de lo que cabe, puedes dar las gracias de seguir comiendo, aunque no puedas tumbarte en tu sofá después de hacerlo. No sufres por lo material, ni por la perdida de comodidad, sino por la perdida de normalidad, por la perdida de tranquilidad, de paz, de estabilidad, de control....eso provoca un miedo impresionante; y unido a la desesperanza por ver que la vida se ha parado de repente y que va a tardar mucho tiempo en coger la velocidad anterior es lo que le sucede a miles de lorquinos desde el 11 de abril de 2011.
Estamos muertos de miedo, cualquier mínimo movimiento o ruido extraño altera al mas tranquilo de nosotros; estamos muerto de miedo, mirando a todas las cornisas cuando andamos por la calle, mirando a todos los edificios cuyo recuerdo es totalmente diferente; estamos muertos de miedo, sin saber que va a pasar con nuestras casas, con nuestros comercios, con nuestra cultura, como se va a arreglar, cuanto va a tardar y si vamos a ser capaces de hacerle frente a los gastos; estamos muertos de miedo, nada volverá a ser como antes.
Nuestras vidas han cambiado, se encuentran a la deriva, entre el desconocimiento y el terror, entre la pena y la rabia...sin perspectivas de mejora a corto plazo, va a ser un duro camino, excesivamente largo. Todos nosotros sabemos que lo conseguiremos, cueste lo que cueste, no somos derrotistas, confiamos en nuestras posibilidades, pero duele ver que todo lo que nos rodea, todas esas calles que tantas veces hemos recorrido, que tan buenos momentos han vivido con nosotros, que nos han visto crecer, llorar, reír, gritar, cantar, bailar, soñar y hacer nuestros sueños realidad, están ahora mismo vaciás, perdidas del encanto de los lorquinos, de tantos recuerdos, abandonadas en la noche, intentando recuperarse del duro golpe durante el día con esos muertos de miedo que no van a abandonarla, porque Lorca esta demasiado metida en nuestros corazones, porque no vamos a olvidar a las victimas que forman parte de la desgracia, porque algunos seguimos vivos, pero TODOS SOMOS VICTIMAS, todos tenemos porque llorar y porque avergonzarnos al reír a carcajadas....estamos muertos de miedo, pero ese miedo se transformará en esperanza y deseos de lucha, porque somos lorquinos y no nos vamos a dejar hundir....
                                        ....¡Sonreiremos!...mientras nos rabie el alma de dolor...


No hay comentarios:

Publicar un comentario