lunes, 26 de noviembre de 2012

"La contemplación de la naturaleza me ha convencido de que nada de lo que podemos imaginar es imposible"

¿Como el simple aleteo de una mariposa puede llegar a embrujar de esta manera? La belleza de este insecto, la superación de si misma palpable en su metamorfosis, ¿será eso lo que hace de la mariposa el amuleto perfecto para la vida?
Las lepidopteras nacen como orugas, como la clase más baja y horripilante de la naturaleza de insectos; pero su destino es totalmente diferente y sorprendente. Pasan por un estado de crisálida que les trae al mundo como una bella mariposa...
Esto nos permite creer en las segundas oportunidades, en la majestuosidad y perfección de la naturaleza, en  la opción de cambiar, de poder ser diferente y en que nada es para siempre...
Sigamos viviendo, luchando, soñando con que un día seremos bellas y alegres mariposas...porque eso es lo que nos permite sobrevivir como orugas.